domingo, 1 de enero de 2012

no quería reconocerlo



No quería reconocerlo,
pero mi razón sucumbe
ante el delirio
de tus grandezas,
tu monumental silueta…
tu ingle hipnótica,
tu vástago desierto,
tu piel cristalina
encharcada de rocío
en las madrugadas
en las que su olor…
alcanza a encender
   mi instinto más básico.

No quería reconocerlo
pero desisto…


1 comentario:

gracias por gritar en silencio