domingo, 5 de febrero de 2012

Otro día será


 7 de enero de 2012

Axel me ha puesto un zumo de tomate en una placita céntrica de Hasselt.
He bajado del hotel andando hasta el centro (1 hora de trayecto), el día está nublado y de vez en cuando llueve un poquito. Pero aquí en la terraza se está bien, bajo las estufas, acompañado de gente guapa con un trajín tremendo para las horas que son… las 9:45 de un sábado.
El zumo de tomate por Chuchi; sentarme por la lluvia y escribir por la de siempre… un amor imposible; pero un amor de verdad, del sano. Del que hace llorar por el íntimo placer de sentirlo tan profundamente.
¿Qué quieres que te diga? Ya me llaman los del curre, ahora toca acoplarse al grupo o la otra opción (b, c, d… omega). Pero vuelven a insistir y hay que ir a la lavandería por cachabas… así que en 20 minutos en el Van Gogh… de ahí a la lavandería y yo posiblemente; al hotel. Sin el Principito, aunque le he buscado. Otro día será.

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